Revista de Investigación en Ciencias de la Educación
Vol. 2, No 3, enero - junio 2024, 14-26
ISBN: en trámite
https://revistasfiecyt.com/index.php/riced
14
Flipped classroom como metodología de enseñanza y aprendizaje de
estudios sociales
The flipped classroom as a methodology for teaching and learning social
studies
Rosa Esperanza Salas Molina
1
1
Unidad Educativa Ambato. Ambato, Ecuador.
1
Autor de correspondencia: Rosysalas2010@live.com
Datos del artículo:
Recibido: agosto 20, 2023
Revisado: noviembre 25, 2023
Aceptado: diciembre 12, 2023
Publicación: enero 1, 2024
Palabras clave:
aula invertida, proceso de
enseñanza y aprendizaje,
metodologías activas, guía
metodológica.
Keywords:
flipped classroom, teaching
and learning process, active
methodologies,
methodological guide.
DOI:
https://doi.org/10.53877/riced
2.3-12
Este artículo está bajo la licencia
Resumen
Esta investigación abordó el problema del desconocimiento del Aula Invertida
como una metodología activa para la enseñanza de Estudios Sociales. Se
planteó como objetivo conocer el aporte didáctico del Aula Invertida en la
mejora de la enseñanza y el aprendizaje de Estudios Sociales con los
estudiantes de los décimos años de la Unidad Educativa “Ambato” de
Ecuador. Se aplicó un enfoque cualitativo y cuantitativo para el análisis del
problema detectado. El diseño de la investigación bibliográfica-documental
permitió la compilación de datos de varios autores que han estudiado el tema
y sustentan la investigación. Asimismo, el estudio es descriptivo por cuanto se
especificaron las propiedades, las características y los perfiles del cuerpo
docente encargado de impartir la asignatura de Estudios Sociales, quienes se
someterán a una propuesta de enseñanza-aprendizaje basada en metodologías
activas como el Aula Invertida. Se empleó como técnica la encuesta y como
instrumento el cuestionario. La validez del instrumento se determinó por el
criterio de tres expertos que concluyeron que los ítems establecidos son
factibles de aplicar porque las preguntas son claras y permiten medir las
variables de estudio. La confiabilidad se automatizó mediante el coeficiente
Alfa de Cronbach, calculado en el programa estadístico SPSS, obteniendo un
valor de 0,879, lo cual indica que es muy confiable. Del total de 9 docentes
encuestados, solo el 11,1% manifestó que siempre utiliza diversos tipos de
Aula Invertida. Con este resultado, se evidencia la necesidad de que los
maestros innoven su práctica educativa mediante el empleo de nuevos
métodos activos, por lo que se diseñó una Guía Metodológica para la
implementación del aula invertida en los procesos de enseñanza-aprendizaje
de Estudios Sociales, brindando una solución al problema presentado. La
propuesta fue validada mediante una actividad de pretest y postest aplicada a
35 estudiantes de Décimo Año de Educación General Básica. Se utilizó la
prueba de Shapiro-Wilk, ya que la muestra de datos es menor a 50. Dicha
prueba arrojó un p-valor menor a 0,05, indicando que los datos no siguen una
distribución normal. Para determinar si existía una diferencia entre las
observaciones pareadas, se aplicó la Prueba de Wilcoxon debido a la
naturaleza no paramétrica de los datos. Los resultados de la Prueba de
Wilcoxon confirmaron una diferencia significativa entre el pretest y el postest,
lo cual evidencia que la clase invertida mejora el rendimiento de los
estudiantes.
Rosa Esperanza Salas Molina
© Fundación Internacional para Educación la Ciencia y la Tecnología, “FIECYT” 15
Abstract
This research addressed the problem of the lack of knowledge of the Inverted
Classroom as an active methodology for teaching Social Studies. The objective
was to know the didactic contribution of the Inverted Classroom in the
improvement of teaching and learning of Social Studies with tenth grade
students of the “Ambato” Educational Unit in Ecuador. A qualitative and
quantitative approach was applied for the analysis of the detected problem.
The bibliographic-documentary research design allowed the compilation of
data from several authors who have studied the subject and support the
research. Likewise, the study is descriptive in that it specified the properties,
characteristics and profiles of the teaching staff in charge of teaching the
subject of Social Studies, who will be submitted to a teaching-learning
proposal based on active methodologies such as the Inverted Classroom.
The survey was used as a technique and the questionnaire as an instrument.
The validity of the instrument was determined by the criteria of three experts
who concluded that the established items are feasible to apply because the
questions are clear and allow measuring the study variables. The reliability
was automated by means of Cronbach's Alpha coefficient, calculated in the
SPSS statistical program, obtaining a value of 0.879, which indicates that it is
very reliable. Of the total of 9 teachers surveyed, only 11.1% stated that they
always use various types of Inverted Classroom. With this result, the need for
teachers to innovate their educational practice through the use of new active
methods is evident, so a Methodological Guide was designed for the
implementation of the inverted classroom in the teaching-learning processes
of Social Studies, providing a solution to the problem presented.
The proposal was validated by means of a pretest and posttest activity applied
to 35 students of Tenth Year of General Basic Education. The Shapiro-Wilk test
was used, since the data sample is less than 50. This test yielded a p-value of
less than 0.05, indicating that the data do not follow a normal distribution. To
determine if there was a difference between paired observations, the Wilcoxon
Test was applied due to the non-parametric nature of the data. The results of
the Wilcoxon Test confirmed a significant difference between the pretest and
posttest, providing evidence that the inverted classroom improves student
performance.
Forma sugerida de citar (APA):
Salas-Molina, R. E (2024). Flipped classroom como metodología de enseñanza y aprendizaje de estudios
sociales. RICEd: Revista de Investigación en Ciencias de la Educación. 2(3), 14-26.
https://doi.org/10.53877/riced2.3-12
INTRODUCCIÓN
El presente estudio se centra en la importancia de aplicar metodologías activas como el Aula
Invertida (Flipped Classroom) en la enseñanza de Estudios Sociales, un tema que ha cobrado
relevancia tras el impacto de la pandemia de COVID-19 en el ámbito educativo. Con la
transición a la educación virtual, tanto docentes como estudiantes enfrentaron el desafío de
adaptar sus roles. Los profesores, aunque de forma intuitiva, implementaron nuevas
estrategias para facilitar el aprendizaje a distancia; mientras que los estudiantes, junto a sus
familias, asumieron un rol más activo y autónomo en sus procesos de aprendizaje,
abandonando su papel tradicionalmente pasivo (Becerra et al., 2023).
Esta situación reveló una problemática subyacente en la práctica docente: el uso
predominante de métodos tradicionales en la enseñanza de Estudios Sociales, caracterizados
por actividades de lectura y exposición de contenidos que limitan la exploración de análisis
crítico y la creatividad en los estudiantes. La falta de integración de las Tecnologías de la
Información y la Comunicación (TIC) en estas prácticas ha restringido el potencial de los
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alumnos para interactuar de manera crítica y dinámica con los contenidos. Además, en el
modelo educativo convencional, los estudiantes se ven reducidos a un rol de receptores, lo
cual dificulta el desarrollo de habilidades necesarias para enfrentar los retos de una sociedad
en constante evolución (Romero, 2021).
El objetivo de esta investigación es proponer el Aula Invertida como una metodología
efectiva para el proceso de enseñanza y aprendizaje en Estudios Sociales, enfocándose en
estudiantes de décimo grado de las Escuelas de Educación Básica de Ecuador. Para ello, se
buscará identificar las metodologías actualmente empleadas por los docentes en esta materia,
determinar la frecuencia de uso del Aula Invertida, y diseñar una guía práctica para su
implementación. De este modo, se pretende fomentar un aprendizaje significativo y
colaborativo, adaptado a las demandas de la era digital, en el que se promueva la interacción
de los estudiantes con la tecnología y el desarrollo de su pensamiento crítico. Este enfoque se
fundamenta en el conectivismo, que permite aprovechar el potencial de las TIC para
enriquecer el aprendizaje y facilitar el acceso a recursos digitales y redes de conocimiento
(Becerra, 2023).
Este análisis permitirá valorar las oportunidades que el Aula Invertida ofrece como una
alternativa a las metodologías tradicionales, al transformar al estudiante en protagonista de
su propio proceso de aprendizaje y promover el uso racional de las TIC para una educación
más inclusiva y dinámica.
MÉTODOS Y MATERIALES
Para esta investigación se empleó un enfoque mixto, cualitativo y cuantitativo, bajo un
paradigma constructivista, lo que permitió analizar y describir el problema identificado como
caso práctico en la Unidad Educativa “Ambato” de la ciudad de Ambato de manera medible
e interpretativa. El enfoque cuantitativo facilitó la identificación de patrones y relaciones
causa-efecto, contribuyendo a generalizar los resultados de acuerdo con la propuesta de
Sampieri (2006). Complementariamente, el enfoque cualitativo aportó un análisis detallado
de las respuestas de los participantes, favoreciendo una interpretación integral de los datos
obtenidos, en línea con la perspectiva de Hernández, Fernández y Baptista (2014).
La población estuvo compuesta por nueve docentes del área de Estudios Sociales que
impartían clases en nueve paralelos de las jornadas matutina y vespertina. Debido a que se
trataba de una población finita, se trabajó con la totalidad de los docentes, eliminando la
necesidad de un muestreo.
Para la recolección de datos, se definieron y operacionalizaron las variables
independiente y dependiente, estableciendo dimensiones e indicadores que sirvieron de base
para la elaboración de los ítems de las encuestas aplicadas a los docentes. En cuanto a la técnica
cuantitativa, se utilizó la encuesta como herramienta primaria, junto con el cuestionario como
instrumento específico para recolectar los datos directamente de la fuente. De acuerdo con
Domínguez (1996), la encuesta es una técnica de investigación que, mediante procedimientos
estandarizados, permite la recolección y el análisis de datos de una muestra representativa de
la población. En este estudio, la encuesta fue aplicada en formato online a través de Google
Forms, previa autorización de la máxima autoridad institucional, y se compartió el enlace
respectivo con los docentes para facilitar la recopilación de información de manera rápida y
eficaz.
La validez del cuestionario fue confirmada por el criterio de tres expertos en la materia,
quienes concluyeron que los ítems eran adecuados para recopilar la información requerida.
La confiabilidad del instrumento fue verificada mediante el coeficiente Alfa de Cronbach,
calculado con el programa IBM SPSS Statistics 27, obteniendo un valor de 0,879, lo cual
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asegura la confiabilidad del instrumento, ya que cuanto más cercano es este coeficiente a 1,
mayor es la fiabilidad de la herramienta.
El proceso de recolección de datos se realizó en varias etapas: primero, se definieron y
operacionalizaron las variables; luego, se diseñó el cuestionario y se organizó el trabajo de
campo; posteriormente, se aplicó la encuesta y se procedió a la recopilación y tratamiento de
los datos. Se realizó un análisis e interpretación de los resultados obtenidos, lo cual permitió
alcanzar una visión comprensiva de los datos y una interpretación rigurosa conforme a los
objetivos de la investigación.
La metodología utilizada para la validación de la propuesta basada en el Aula Invertida
incluyó un proceso riguroso de pretest y postest, implementado con el fin de medir el impacto
de la metodología en el rendimiento de los estudiantes de Estudios Sociales. La validación se
llevó a cabo con una muestra de 35 estudiantes de décimo año de Educación General Básica,
a quienes se les aplicó una prueba de opción múltiple relacionada con los temas de la
asignatura, tanto antes como después de utilizar la guía metodológica. El análisis de los datos
obtenidos se realizó mediante el software SPSS, utilizando primero la prueba de Shapiro-Wilk
para evaluar la normalidad de los datos, dado que la muestra era menor a 50 participantes. El
resultado arrojó un p-valor inferior a 0,05, lo que indicó que los datos no seguían una
distribución normal. Por lo tanto, se empleó la prueba no paramétrica de Wilcoxon para
analizar las diferencias entre las observaciones pareadas del pretest y postest.
RESULTADOS
Se elaboró una Guía metodológica para la aplicación del aula invertida como metodología
activa en el proceso de enseñanza aprendizaje de Estudios Sociales de los estudiantes de
Décimo Año Educación General Básica de la Unidad Educativa “Ambato”, estructurada en
fases claras que facilitan la organización y desarrollo de las clases. Esta guía ofrece estrategias
didácticas activas que promueven el aprendizaje colaborativo y significativo en los
estudiantes de Estudios Sociales. A través de la descripción de pasos prácticos y el análisis de
metodologías efectivas, se busca empoderar a los docentes en su práctica educativa,
mejorando la interacción y el autoaprendizaje en el aula.
La Guía Metodológica para la implementación del Aula Invertida se fundamenta en una
teoría que transforma el rol del estudiante, promoviendo una participación más activa en su
aprendizaje a través de herramientas tecnológicas. Su objetivo principal es invertir el modelo
tradicional, permitiendo que los estudiantes se preparen con anticipación mediante
conferencias breves en video. Esto optimiza el tiempo de clase para actividades colaborativas
y proyectos. Entre las ventajas de esta metodología destacan el aumento del compromiso
estudiantil, el aprendizaje a su propio ritmo y la mejora del ambiente del aula, lo que fortalece
la interacción entre alumnos y docentes (Acedo, 2013; Bergman y Sams, 2012).
La guía se organiza en secciones que abarcan desde la definición y características del
Aula Invertida hasta los momentos clave de su implementación, evaluaciones, y el rol del
docente y del estudiante, La guía se centra en tres momentos clave: antes de la clase, durante
la clase y después de las clases, abordando estrategias específicas para cada etapa de
aprendizaje para Estudios Sociales.
¿Qué es el Aula Invertida o Flipped Classroom?
El Aula Invertida, o Flipped Classroom, es un enfoque pedagógico innovador que
modifica la estructura tradicional de las clases. En lugar de que las explicaciones teóricas se
impartan durante el tiempo de aula, estas se entregan en formato digital para que los
estudiantes las revisen y estudien de manera autónoma antes de la clase. Esto permite que el
tiempo en el aula se dedique a actividades prácticas, debates y resolución de problemas,
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promoviendo así una mayor autonomía y aprovechando mejor las sesiones presenciales (Sams
y Bergman, 2014).
En este modelo, los estudiantes llegan al aula con los conocimientos previos adquiridos,
lo que permite que el docente enfoque la clase en la resolución de dudas, el trabajo
colaborativo y la aplicación práctica de los conceptos a través de proyectos, análisis de casos,
presentaciones y otras dinámicas participativas como debates o la elaboración de mapas y
redes conceptuales.
Además, el Aula Invertida ofrece a los docentes la ventaja de reutilizar los recursos
digitales, como videos y materiales explicativos, en distintos cursos o niveles, optimizando el
esfuerzo invertido en su creación. Esta metodología es altamente flexible y se puede adaptar
a diversas disciplinas y objetivos educativos, lo que la convierte en una herramienta valiosa
para la enseñanza moderna.
Chica (2016) presenta la siguiente clasificación de Aula Invertida.
Tabla 1.
Clasificación de Aula Invertida/ Flipped Classroom
Tipo
Descripción
Aula Invertida tradicional
Los estudiantes visualizan los vídeos en casa y
en el aula se realizan actividades comunes
(resolución de ejercicios, dudas)
Aula Invertida orientada al
debate
Los vídeos presentados se enfocan para una reflexión
y debate en el aula.
Aula Invertida para la
experimentación
Los deos son demostraciones que
posteriormente podrán replicar los estudiantes.
Aula Invertida como
aproximación
Los estudiantes ven los vídeos en clase en
pequeños grupos y, posteriormente, el docente va
pasando por ellos para resolver dudas.
Aula Invertida basada en grupos
Los estudiantes visualizan los vídeos por su
cuenta y en el aula se unen en grupos o equipos para
resolver las tareas.
Aula Invertida virtual
Todo ocurre en la virtualidad: vídeos, tareas,
evaluaciones, etc.
Aula Invertida en la que se
invierte al profesor
Fuente: Servicio de Innovación Educativa de la UPM (2020)
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Tabla 2.
Pilares fundamentales de la Flipped Classroom
Pilares
Detalle
Aprendizaje profundo,
progresivo y más
significativo
Estimula al estudiante a aprender fuera del aula, a su ritmo y en
cualquier lugar y momento para acceder al material y repasar
cada lección cuantas veces quiera
El estudiante es el centro
del aprendizaje y el
profesor es su coach
El estudiante pasa de ser sujeto pasivo a sujeto activo.
El profesor es dinamizador del aprendizaje, tiene más
tiempo para atender y resolver dudas.
Contenido interactivo
ordenado y
estructurado
Mediante herramientas, recursos y softwares de aprendizaje se
tienen el contenido organizado y accesible. Pueden compartir
su conocimiento en clase resolver dudas, hacer debates y
actividades en grupo.
Toda la tecnología al
servicio del
aprendizaje
El aprendizaje se vuelve dinámico, interactivo y
enriquecedor en base a la tecnología.
Ahora los softwares educativos pueden instalarse en
móviles y tablets, el aprender es más fácil y eficaz.
Nota: Adaptado de los cuatro pilares del Aula invertida, por Isabel Loncomil (2021)
Según Hernández y Tecpan (2017), la aplicación de la metodología Flipped Classroom o Aula
Inversa se fundamenta en un proceso de planificación que integra teoría y práctica. Esto
permite que la ejecución y el seguimiento del proceso educativo se realicen de manera efectiva
en las fases de Antes de la Clase, Durante la Clase, Después de la Clase y la evaluación
propuesta a lo largo de todo el proceso educativo. Es esencial que el docente aproveche sus
reuniones y/o sesiones, ya sean presenciales o virtuales, para explicar cómo llevar a cabo lo
que se ha preparado. Estas actividades son clave para asegurar el éxito de la metodología del
aula invertida (p. 06).
El análisis de la encuesta aplicada a los docentes revela una aceptación significativa de
la metodología del Aula Invertida, destacando su importancia como herramienta pedagógica
que fomenta la interacción y la reflexión crítica en los estudiantes. Del total de los encuestados,
un 77,8% consideró que esta metodología permite una participación de los estudiantes,
creando un espacio donde el aprendizaje se vuelve más dinámico y colaborativo. Esta
perspectiva refuerza la idea de que el Aula Invertida genera un entorno de sinergia entre la
educación tradicional y el aprendizaje virtual, lo cual es clave para desarrollar la
independencia del estudiante y construir un aprendizaje significativo (Vidal et al., 2014).
Tabla 3.
El Aula Invertida permite interactuar y reflexionar
Escala
Frecuencia
Porcentaje
Siempre
7
77,8%
Casi siempre
1
11,1%
A veces
1
11,1%
Nunca
0
0 %
Casi nunca
0
0 %
Total
9
100 %
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Figura 1.
Aula Invertida permite interactuar y reflexionar
Asimismo, el 66,7% de los docentes encuestados destacaron que el Aula Invertida tiene como
objetivo fomentar la investigación. Este enfoque se percibe como una estrategia que invita a
los estudiantes a explorar los temas en profundidad, promoviendo a un aprendizaje
autodirigido y enriquecedor. Para ello, los docentes subrayan la importancia de preparar
recursos educativos multimedia, listas de discusión y actividades de debate que impulsen a
los estudiantes a investigar y analizar de manera crítica (Martínez et al., 2013).
Tabla 4.
El Aula Invertida fomenta la investigación
Escala
Frecuencia
Porcentaje
Siempre
6
66,7%
Casi siempre
2
22,2%
A veces
1
11,1%
Nunca
0
0 %
Casi nunca
0
0 %
Total
9
100 %
Figura 2.
El aula invertida fomenta la investigación
Rosa Esperanza Salas Molina
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Estos hallazgos son fundamentales para la implementación de la guía metodológica
propuesta, pues reflejan que el profesorado está dispuesto a adoptar nuevas metodologías
que transformen el proceso de enseñanza y aprendizaje. La validación por parte de los
docentes de los beneficios del Aula Invertida establece una base sólida para implementar esta
metodología de manera estructurada, utilizando la guía metodológica como soporte en la
preparación de materiales y actividades. Con esta guía, se pretende fortalecer el rol activo del
estudiante y consolidar un aprendizaje autónomo, lo cual, según los resultados obtenidos, es
ampliamente valorado por los docentes como un cambio positivo en la educación actual.
Guía metodológica
La Guía Metodológica para el proceso de enseñanza-aprendizaje de Estudios Sociales
mediante la metodología del Aula Invertida ha sido desarrollada como un recurso de apoyo
para los docentes que buscan integrar actividades innovadoras y virtuales en sus clases. El
objetivo principal es fortalecer el aprendizaje de la asignatura al involucrar a los estudiantes
en un proceso s dinámico y autónomo. Para lograrlo, el docente debe tener en cuenta las
características específicas de cada fase dentro del enfoque de aula invertida, como se ilustra
en el gráfico que acompaña esta guía.
El punto de partida de cualquier proceso educativo efectivo es la planificación. En este
sentido, la guía enfatiza que una planificación adecuada es clave para el éxito del Aula
Invertida. Basada en propuestas de diversos autores que respaldan este enfoque pedagógico,
la guía sugiere un formato de planificación que el docente debe seguir. Este formato organiza
el proceso de enseñanza en etapas, asegurando que los recursos digitales y las actividades
prácticas se integren de manera coherente, y que el tiempo en el aula se aproveche al máximo
para la interacción, el análisis y el trabajo colaborativo entre los estudiantes. De este modo, el
Aula Invertida no solo transforma la forma de enseñar, sino que también enriquece la
experiencia de aprendizaje al involucrar a los estudiantes de manera activa en su propio
proceso educativo.
Figura 3.
Planificación de flipped classroom para el estudiante
ANTES DE LA CLASE
Diseño
Producción/Herramienta
recursos digitales
Vínculos/Implementación
Ingreso al aprendizaje en
línea
Desarrollo de las actividades
Reto N 1:
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Durante la clase
Destreza
Tiempo
Partes de la lección (Contenido)
Después de la clase
Tiempo
Aspectos para retomar y/o evaluar
Actividad /retroalimentación y/o evaluación
Eevaluación:
Bibliografía para el estudiante:
Manosalvas y Ronquillo (2023) señala que, una vez que se han creado o seleccionado los
materiales de estudio, el profesor es responsable de entregarlos a los estudiantes para que los
trabajen de manera autónoma desde casa. Esta distribución puede realizarse a través de
diversos medios como correo electrónico, blogs, Google Classroom u otras plataformas de
aprendizaje virtual.
En cuanto al tiempo para el aprendizaje autónomo, el docente establece un período
específico dentro del cual los estudiantes pueden gestionar cuándo, dónde y cuánto estudiar.
Para monitorear su progreso, se pueden emplear cuestionarios de control o foros donde los
estudiantes discutan las ideas de la lección y aclaren dudas. Es esencial que el profesor
proporcione guías claras y objetivas que ayuden a los estudiantes a autorregular su proceso
de aprendizaje.
Figura 4.
Ejemplo de Planificación con el Método de Investigación en el Aula Invertida
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Validación de la guía
Para validar la guía metodológica propuesta en esta investigación, se implementó una
actividad de pretest y postest, aplicada a 35 estudiantes de décimo año de Educación General
Básica, con edades entre 13 y 14 años. La prueba consistió en ocho preguntas de opción
múltiple, enfocadas en temas de Estudios Sociales; cada pregunta correcta se calificon un
punto, y las incorrectas con cero. Este sistema de puntuación permitió obtener un registro
detallado de los resultados, que incluyó datos individuales como el número de estudiantes,
su sexo, el número total de ítems y los puntajes obtenidos tanto en el pretest como en el
postest.
Siguiendo la recomendación de DATAtab Team (2024), se aplicó la prueba de
normalidad Shapiro-Wilk debido al tamaño reducido de la muestra, que cuenta con menos de
50 observaciones. La prueba Shapiro-Wilk fue útil para verificar la normalidad de las
puntuaciones, y los resultados mostraron un p-valor menor a 0,05, indicando que los datos no
presentan una distribución normal. Esta observación es fundamental, ya que influye en la
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selección de las pruebas estadísticas adecuadas para el análisis de diferencias entre el pretest
y el postest.
Dado que los datos no son paramétricos, se utilizó la Prueba de Wilcoxon para
comparaciones entre las observaciones pareadas (pretest y postest).
Tabla 5.
Resumen de prueba de rangos con signo de Wilcoxon para muestras
relacionadas
N total
35
Estadístico de prueba
554,000
Error estándar
55,277
Estadístico de prueba
estandarizado
4,948
Sig. Asintótica (prueba bilateral)
<,001
Los resultados de la Prueba de Wilcoxon arrojaron un valor significativo, lo que confirma que
hay una diferencia estadísticamente significativa entre las puntuaciones del pretest y del
postest. Este hallazgo respalda la hipótesis de que el uso del aula invertida como metodología
mejora el rendimiento académico de los estudiantes en Estudios Sociales, reflejando un
progreso en su aprendizaje después de implementar la guía metodológica.
Esta validación estadística subraya el impacto positivo del Aula Invertida en el
rendimiento de los estudiantes, sugiriendo que metodologías activas como esta pueden ser
herramientas eficaces en la mejora del aprendizaje en contextos escolares.
DICUSIÓN
A partir del estudio realizado, se concluye que la metodología del Flipped Classroom,
implementada a través de una guía metodológica específica, resulta altamente efectiva para
fomentar una enseñanza activa en los estudiantes de Estudios Sociales. Este enfoque permite
evaluar no solo la percepción y satisfacción de los estudiantes hacia la metodología, sino
también observar cómo esta contribuye a la mejora de su rendimiento académico y
habilidades de aprendizaje autónomo (Doorantes-Nova, Hernandes-Mosqueda y Tobón-
Tobón, 2016). La literatura actual refuerza estos hallazgos, destacando que el Aula Invertida
contribuye al desarrollo de la autonomía estudiantil y fomenta una mayor participación en el
proceso de aprendizaje (Han y Rokenes, 2020). En este sentido, se observa un claro beneficio
en cuanto a la reducción de la ansiedad frente a la materia, al mismo tiempo que incrementa
la autoconfianza y motivación de los estudiantes (Prado, 2022).
Además, la metodología del Aula Invertida, al proporcionar al estudiante la
responsabilidad de explorar el contenido de manera previa, permite que el tiempo en el aula
se enfoque en actividades colaborativas y de retroalimentación directa. Esto coincide con
estudios que subrayan el valor del aprendizaje activo, donde los estudiantes muestran
mayores tasas de comprensión y retención de conceptos complejos cuando están involucrados
en tareas prácticas en el aula (Díaz, Marín, Meleán, y Ausejo 2021). La aplicación del Flipped
Classroom facilita un ambiente en el que los estudiantes pueden interactuar entre ellos y con
el docente, promoviendo el aprendizaje colaborativo y fortaleciendo las habilidades
interpersonales, lo que se considera esencial para los Estudios Sociales (Roehl, Reddy y
Shannon, 2013).
Asimismo, el análisis estadístico realizado, que incluyó la Prueba de Wilcoxon para
contrastar los resultados de pretest y postest, demuestra que la metodología del Aula
Invertida tiene un impacto significativo en la mejora del rendimiento académico de los
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estudiantes. Los datos obtenidos respaldan la hipótesis de que esta metodología no solo
aumenta el interés por la materia, sino que también optimiza el proceso de enseñanza-
aprendizaje al adaptarse a diferentes estilos de aprendizaje y necesidades individuales (Arnal,
2017). Este hallazgo se alinea con investigaciones previas, que sugieren que el aprendizaje
activo en un entorno de Aula Invertida permite a los estudiantes con distintas aptitudes
encontrar nuevas formas de acceder al contenido y facilita la autorregulación en sus estudios
(Bergmann y Sams, 2012).
Por otra parte, se reconoce que el éxito de esta metodología depende en gran medida de
la preparación adecuada de los materiales y de la capacitación docente para facilitar la
transición de un enfoque tradicional a uno centrado en el estudiante. La literatura enfatiza la
necesidad de una formación constante en metodologías activas para que los docentes puedan
diseñar actividades efectivas y contextualmente relevantes (Olivero y Medina, 2022). En
consonancia con lo planteado por Cervera, Montalvo y Barturén (2023), los resultados
sugieren que los docentes deben innovar continuamente para mantener al estudiante
motivado y crear oportunidades de renovación en el contenido educativo, particularmente en
disciplinas como los Estudios Sociales, donde el análisis crítico y la contextualización son
fundamentales.
Finalmente, este estudio respalda la idea de que metodologías activas como el Flipped
Classroom no solo son pertinentes para la enseñanza en áreas teóricas, sino que además
potencian habilidades críticas y metacognitivas en los estudiantes. Este enfoque permite que
los estudiantes construyan su conocimiento a través de la práctica y la discusión guiada,
desarrollando habilidades clave como la autogestión y la cooperación, esenciales para su
futuro desempeño académico y profesional (Sams y Bergmann, 2013). La evidencia recopilada
indica que el Flipped Classroom es una metodología viable para implementar en diversas
áreas del conocimiento, dado su impacto positivo en la motivación y el rendimiento de los
estudiantes.
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RICEd: Revista de Investigación en Ciencias de la Educación, Vol. 2, No 3, enero - junio 2024, 14-26 26
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